La Dirección Regional de Aeropuertos del MOP Atacama ha informado sobre una serie de robos ocurridos en el Aeródromo de Vallenar, siendo el último de ellos en febrero de este año. En ese incidente, delincuentes rompieron el cerco perimetral del recinto y sustrajeron las baterías del sistema de iluminación solar, componente esencial para iluminar la pista, las calles de rodaje y las ayudas visuales durante la noche, en especial durante situaciones de emergencia.
El Seremi de Obras Públicas, Mauricio Guaita Juantok, destacó la importancia de esta infraestructura, señalando “el Aeródromo de Vallenar es parte fundamental de la Red Aérea de Emergencia en nuestra región. Su funcionamiento es vital, sobre todo tras los desastres naturales que nos han afectado en las últimas décadas, como terremotos, aluviones, cortes de carreteras e inundaciones. Este aeródromo facilita la ayuda inmediata en casos de emergencias, por lo que es indispensable que se mantenga en perfecto estado para reducir los tiempos de respuesta cuando se necesite una aeronave.”
Por su parte, el Inspector Fiscal de la Dirección Regional de Aeropuertos, Javier Arnés, informó que, conforme a la normativa aeronáutica, es necesario que al menos el 85% de las balizas estén operativas. Sin embargo, debido al robo, actualmente solo el 50% de las balizas están funcionando. “De un total de 60 luces, los delincuentes sustrajeron 30 baterías. Esto ha provocado que el uso nocturno del aeródromo esté restringido, lo que limita significativamente la capacidad para realizar traslados aeromédicos. Esto afecta directamente a la comunidad de Vallenar, ya que solo se podrán efectuar vuelos de emergencia durante el día”, agregó Arnés.
La directora regional de Aeropuertos, Angélica Munizaga, aclaró que “los sistemas de iluminación solar para la pista de aterrizaje son cruciales para garantizar una respuesta rápida y eficaz en situaciones de emergencia, minimizando así el impacto en momentos críticos. Este robo no solo compromete la operatividad del aeródromo, sino que también pone en riesgo vidas humanas al retrasar la respuesta en momentos de urgencia”.
Finalmente la directora señaló, “es importante que como comunidad reflexionemos sobre las consecuencias de este tipo de delitos. El robo de equipos esenciales para la seguridad y el bienestar de todos no solo afecta la infraestructura pública, sino que pone en peligro la vida de muchas personas, especialmente en situaciones de emergencia donde cada minuto cuenta.
. La protección de nuestras instalaciones y recursos debe ser una prioridad para todos, ya que son elementos fundamentales para nuestra seguridad colectiva.
Solo mediante el esfuerzo conjunto podremos asegurar que la infraestructura crítica continúe operando para el beneficio de la comunidad, en especial en momentos tan vulnerables como los desastres naturales y las emergencias sanitarias”.
