Bautista de la Peña tiene 15 años y hace unos días jugó la qualy del torneo Challenger 75 de Santiago, y si bien no logró ingresar al cuadro final del campeonato (perdió con el argentino Alejo Lingua Lavallén, 404 del ranking ATP), cuenta con uno de los más experimentados coach del circuito: su padre, Horacio “Pulga” de la Peña, quien reconoce estar ilusionado con hacer de su hijo una prominente figura del circuito. “Es más fácil (entrenar a su hijo), porque estoy ciento por ciento seguro de que él entiende lo que yo hablo. Estoy también ciento por ciento seguro de que va a hacer lo que yo le digo, porque si no, lo castigo, jajajá. Pero hablando en serio, la gran diferencia que yo creo que hay, es que él sabe que el ciento por ciento de mi atención está con él. Eso yo creo que es invaluable. Porque el entrenador, por más pasión que tenga, es su trabajo. Pero para mí además es mi hijo”, sincera el extenista en conversación con un medio de circulación nacional. Y es que el compromiso para De la Peña con su hijo es total. “Yo sueño todo el tiempo pensando cuáles son las cosas que tengo que generar y hacer para que él tenga una oportunidad en el tenis mundial. Y armo todo a su alrededor”, explica en lun.com. ¿Si veo a mi hijo entre esas promesas? Sí. Estoy tranquilo en que, primero, la virtud número uno..., Bautista tiene una buena velocidad media. Ahora tiene... La gran verdad del tenis...Eso es algo..., puntualiza el coach transandino. Sueño todo el tiempo pensando cuáles son las cosas... Trabajamos desde muy chiquito y realmente..., finaliza. Fuente: Publimetro Deportes
Bautista de la Peña tiene 15 años y hace unos días jugó la qualy del torneo Challenger 75 de Santiago, y si bien no logró ingresar al cuadro final del campeonato (perdió con el argentino Alejo Lingua Lavallén, 404 del ranking ATP), cuenta con uno de los más experimentados coach del circuito: su padre, Horacio “Pulga” de la Peña, quien reconoce estar ilusionado con hacer de su hijo una prominente figura del circuito. “Es más fácil (entrenar a su hijo), porque estoy ciento por ciento seguro de que él entiende lo que yo hablo. Estoy también ciento por ciento seguro de que va a hacer lo que yo le digo, porque si no, lo castigo, jajajá. Pero hablando en serio, la gran diferencia que yo creo que hay, es que él sabe que el ciento por ciento de mi atención está con él. Eso yo creo que es invaluable. Porque el entrenador, por más pasión que tenga, es su trabajo. Pero para mí además es mi hijo”, sincera el extenista en conversación con un medio de circulación nacional. Y es que el compromiso para De la Peña con su hijo es total. “Yo sueño todo el tiempo pensando cuáles son las cosas que tengo que generar y hacer para que él tenga una oportunidad en el tenis mundial. Y armo todo a su alrededor”, explica en lun.com. ¿Si veo a mi hijo entre esas promesas? Sí. Estoy tranquilo en que, primero, la virtud número uno..., Bautista tiene una buena velocidad media. Ahora tiene... La gran verdad del tenis...Eso es algo..., puntualiza el coach transandino. Sueño todo el tiempo pensando cuáles son las cosas... Trabajamos desde muy chiquito y realmente..., finaliza. Fuente: Publimetro Deportes