En una hora se deben retrasar los relojes este sábado 6 de abril, dando inicio así
al horario oficial de invierno en prácticamente todo el territorio nacional,
exceptuando a la Región de Magallanes y la Antártica Chilena, donde no se
realiza el ajuste.
De esta forma, amanecerá y se hará de noche más temprano, generando apoyo
por un lado y detractores por otro, por cuanto no logran acostumbrarse fácilmente
a este cambio que a algunas personas les produce trastornos en los patrones de
sueño, cansancio excesivo y disminución de la concentración.
Para Rodrigo Domínguez, profesor de la carrera de Prevención de Riesgos de la
Universidad Técnica Federico Santa María y director del Diploma en Higiene
Ocupacional, el horario que se inicia este sábado “se alinea mejor con la fisiología
circadiana humana intrínseca y se adecua mejor al ajuste natural del reloj humano
accionado por el zeitgeber exógeno más poderoso que es la luz. El horario de
invierno logra armonizar mejor el reloj biológico con el reloj ambiental, lo que
produce efectos beneficiosos para la salud y la seguridad pública”.
En este sentido, Domínguez explicó que “en la actualidad a las 6 de la mañana
aún está muy oscuro, recién está amaneciendo pasadas las 7.30 de la mañana,
por esta razón se producen alteraciones del sueño que se traducen en efectos
agudos para la salud. El ciclo luz/oscuridad (o fotoperiodo) es fundamental en el
ajuste circadiano, la luz de la mañana al despertar activa el estado de alerta- vigilia
liberando hormonas como el cortisol en tanto durante la noche en respuesta a la
oscuridad se libera melatonina que ayuda en regulación del ciclo sueño-vigilia.”
Añadió que la evidencia científica existente respalda la eliminación de los cambios
de horario estacionales a favor de un horario fijo durante todo el año. “El horario
de verano puede causar un desajuste entre el reloj biológico y el reloj ambiental, lo
que resulta en consecuencias significativas para la salud y la seguridad pública,
especialmente en los días inmediatamente siguientes al cambio anual. Un cambio
a horario estándar permanente está mejor alineado con la biología circadiana
humana y tiene el potencial de producir efectos beneficiosos para la salud y la seguridad
pública”, detalló el profesor.
No obstante lo anterior, el director del Diploma en Higiene Ocupacional, manifestó
que el tema del cambio de hora es un tema controversial “dado que no sólo
considera a lo científico sino también lo político y público y estos últimos son
ámbitos muy subjetivos en los que prevalecen las experiencias y creencias”.
Salud
En relación a la salud, Rodrigo Domínguez puntualizó que un buen dormir
mantiene la salud del cerebro, del corazón y del sistema inmunológico, así como también
ayudan en la consolidación de la memoria y la restauración de la función cerebral. “Es
muy sabido que una buena higiene del sueño contribuye a un buen desempeño mientras
que una deficiente higiene del sueño promueve no solo puede resultar en un mal
desempeño, sino también en accidentes”.