Gobernadores regionales se refieren a crisis migratoria
Comunicado Público:
Desde la Asociación Nacional de Gobernadores y Gobernadoras Regionales -que agrupa a las y los 16 Gobernadores Regionales de Chile-, declaramos nuestra profunda preocupación y malestar con el actual Gobierno central, por la grave crisis de seguridad y sanitaria a la que ha expuesto a las y los habitantes de las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá y Antofagasta, lo cual ha llevado a la población a realizar sendas movilizaciones, paros y bloqueos en respuesta a la inacción de las autoridades centrales.
Esta situación evidencia una vez más el carácter reactivo y displicente que este gobierno ha tenido en materias tan sensibles como la regulación de los flujos migratorios en frontera, y el control y debido afrontamiento de las dinámicas delictuales y criminales, que han aumentado en las regiones del extremo norte de nuestro país. Tanto es así que, luego de meses de solicitudes, advertencias y llamados de las autoridades regionales y locales de estas regiones, el gobierno ha hecho oídos sordos, respondiendo solamente cuando han estallado las crisis o cuando sus autoridades se han visto en riesgo de ser acusadas políticamente o han sido llevadas a tribunales. Lo anterior nos produce profunda desazón, puesto que vemos como se ha invisibilizado nuestras demandas, las que representan a cientos de miles de chilenas y chilenos que claman por atención y solución a sus problemas.
Lamentamos que esta sea una muestra patente del profundo centralismo que seguimos viviendo, y de un práctico desgobierno en materias críticas, que este gobierno se comprometió a abordar y solucionar recién habiendo asumido en 2018. Pues bien, ya a un mes de dejar de ser gobierno, en 2022, este gobierno nos deja regiones sumidas en la indefensión, desesperanza y desconfianza frente a las medidas para afrontar el aumento de la delincuencia, el crimen y las consecuencia sanitarias y sociales de la falta de gestión migratoria.
Sin embargo, como Asociación Nacional de Gobernadores y Gobernadoras Regionales, seguiremos empujando un cambio en las formas de gobernar, en la autonomía de nuestras regiones y en la gestión adecuada y firme para afrontar con claridad los grandes problemas de nuestras regiones. Tenemos esperanza de que el gobierno entrante se encuentre abierto al diálogo y colaboración en estas materias, y trabaje en un Plan Integral para abordar la crisis que actualmente viven las regiones del extremo norte de nuestro país.
No toleraremos más desgobierno, queremos seguridad y dignidad para nuestras regiones.